Empezó la cuenta regresiva. Afortunadamente. Pasó su último 7 de Agosto. Así como el 31 de Diciembre se corea 12, 11, 10… también se inició el tramo final para la presidencia de Ivan Duque. ¡No va mas! No volverán haber ni 20 de Julio, ni Agostos, ni instalaciones de congreso, ni fiestas patrias en manos de este individuo tan particular. Porque en definitiva, fue su personalidad la que marcó su presidencia. Con “nadadito de perro” quiso vender la idea de su “inocencia” y de cómo era mas víctima de las circunstancias que hacedor de su destino. Sin embargo, actitudes de doble faz son mas peligrosas que conductas frenteras. Llegó a su cuaternio enarbolando la idea de “el que la hace la paga” y se dedicó a cobrar facturas en forma desproporcionada. Difícil definirlo como individuo porque presentaba una carita de “yo no fui” o “no es conmigo” pero las intenciones lo delataban. A lo largo de los 3 años asumió posiciones ladinas con un significado nefasto. Vestirse con la chaqueta de la policía en un momento en que algunos miembros de esa institución habían cometido desmanes y gran parte de la sociedad resentía el abuso policial. No importa: ese era su estilo. Desafiante o como se diría en términos psicológicos, manejando una agresividad pasiva que es mas peligrosa que la agresividad frentera.
Sin embargo, la semana anterior fue “la tapa”, como dicen los muchachos. Su actitud mezquina se salió de madre y ni siquiera la importó el nombre y el prestigio del país. Vetó a María Angela Holguín para la presidencia de la Sociedad Iberoamericana, postulada por el gobierno español, pero necesitando el aval del gobierno colombiano. “No tengo ningún candidato” dijo en Perú y le negó al país una representación internacional. Pudo mas la mezquindad de su espíritu que la grandeza de su corazón. Pudo mas el rencor que la generosidad… envenenado sigue pasando cuentas de cobro. El que la hace la paga…
Pero claro, mientras niega una representación honrosa para una mujer colombiana, despliega toda una parafernalia de apoyo a los militares mercenarios en Haití. A los que están implicados en el asesinato de un presidente, generando todo el desprestigio para Colombia. Pero es el mismo Duque, el que apoya indirectamente a los mercenarios “cuidando” su proceso, mientras desprecia un nombramiento internacional. Además, ¿qué pueden decir presos colombianos encarcelados justa o injustamente en otras cárceles del mundo ante la “preferencia” de trato con supuestos asesinos del presidente de Haití? A todos los hijos se los debe tratar por igual y si algo ha manejado Duque con ejemplar actuación, son las preferencias, los privilegios. Sus amigos y su combo “en coche”. Los demás que se revienten.
Terminara su presidencia cosechando especialmente el daño que le hizo al país a nivel internacional. Su obsesión por Maduro, su lambonería con Trump, su violación de acuerdos y tratados internacionales, su doble faz frente al acuerdo de paz. Todo un despropósito que nos llena de vergüenza a nivel mundial. El respeto y admiración ganados en años anteriores fueron modificados por burla y desconfianza para un gobierno que ni siquiera se pudo comprometer como Estado con lo decidido y firmado anteriormente. Sí, le pudo mas la mezquindad que la grandeza. ¡Que se acabe pronto!
Gloria H. @GloriaHRevolturas